tag:blogger.com,1999:blog-5384729885401140932024-03-05T01:27:40.348-08:00sin jurisdicciónel hormiguero crítico del derechoAgustin V.http://www.blogger.com/profile/06139168544542110512noreply@blogger.comBlogger8125tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-41020707295826417892012-09-25T07:14:00.000-07:002012-09-25T08:18:59.993-07:00El odio a la especie humana: la incorporación de la figura de femicidio en el Código Penal. <br />
<div class="MsoFootnoteText">
</div>
<div class="MsoFootnoteText">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 21.3pt; margin-right: 42.5pt; margin-top: 0cm;">
<br /></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 21.3pt; margin-right: 42.5pt; margin-top: 0cm; text-align: right;">
<i><span style="font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Por </span></i><strong><i><span lang="ES" style="background: white; font-size: 11.0pt; line-height: 150%;"><a href="https://www.facebook.com/fetagarciadietze"><span style="color: windowtext; font-weight: normal; mso-bidi-font-weight: bold; text-decoration: none; text-underline: none;">Fermín García Dietze</span></a><o:p></o:p></span></i></strong></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 21.3pt; margin-right: 42.5pt; margin-top: 0cm; text-align: right;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Con la media sanción dada en <st1:personname productid="la C£mara" w:st="on">la Cámara</st1:personname> de Diputados al
proyecto de ley que prevé modificar la actual redacción del artículo 80 del
Código Penal, incorporando la figura del femicidio, parece —muy a nuestro
pesar— que el horizonte constitucional se nos aleja cada vez más. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Como son muchas las reflexiones que
se presentan ante la incorporación de esta figura como un tipo penal autónomo,
terreno de análisis que se amplía aún más por la redacción elegida por los
legisladores, en esta oportunidad voy a tratar brevemente de poner en discusión
uno de los problemas que entiendo se aproxima con mayor ligereza. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">El texto recientemente aprobado por
la cámara baja incorpora un onceavo inciso a la actual redacción de la norma
penal, reprimiendo el homicidio ocasionado <i>a
una mujer cuando el hecho sea perpetrado por un hombre y mediare violencia de
género<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftn1" name="_ftnref1" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><b><span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[1]</span></b></span><!--[endif]--></span></a></i>.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">En definitiva, el problema que
advierto de la descripción típica es que no se encuentra definido, tal como lo
exige el principio de legalidad sustantiva, <i>de
qué hablamos cuando hablamos de violencia de género</i>, lo que da margen a la imposición
arbitraria de una pena y al avance ilimitado del poder punitivo estatal. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Este principio, en su formulación
latina acuñada por Feuerbach,<i> nullum
crimen, nulla poena sine lege praevia, </i>representa una valla para la
vocación punitiva del Estado, una garantía que protege al individuo frente al
poder penal y que impone ciertos requisitos a la ley penal que pueden
clasificarse bajo la triple exigencia de <i>lex
praevia</i>, <i>lex scripta</i> y <i>lex stricta<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftn2" name="_ftnref2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><b><span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[2]</span></b></span><!--[endif]--></span></a></i>.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">El que me interesa, en orden a la
figura típica de femicidio que analizo, es el tercero de ellos, aquel que
impone un mandato de precisión en la redacción de las normas penales<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftn3" name="_ftnref3" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[3]</span></span><!--[endif]--></span></a>.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Y esto así desde que la redacción
elegida hasta aquí por los legisladores, pese a que aún cabe la posibilidad
—lejana, opino— de que se modifique, no permite conocer al intérprete qué
situaciones o conductas se encuentran incluidas en el tipo, pues no se sabe con
certeza qué es y en qué consiste la violencia de género, y mucho menos, cuándo
existe o no violencia de género. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Como dice Bovino, es evidente que de
nada sirve una ley previa dictada por el poder legislativo si la vaguedad de la
redacción impide comprender cuál es la conducta prohibida<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftn4" name="_ftnref4" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[4]</span></span><!--[endif]--></span></a>.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Esta situación lleva a la
posibilidad, real por cierto, de que los jueces se muevan discrecional y
arbitrariamente en el amplio terreno que les concede la norma, decidiendo casi
a dedo cuándo un conflicto en el que haya violencia ejercida por un hombre
hacia una mujer, se encuentra o no abarcado por el tipo en cuestión. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Entiendo de este modo que esta
modificación, lejos de solucionar una problemática que existe, importa la
ilegítima restricción del derecho constitucional que asiste a los individuos
—en este caso y porque así lo eligió el legislador, de los individuos del
género masculino— de conocer qué comportamientos se encuentran o no reprimidos
por la ley penal. Lo cual involucra también la restricción a su derecho de
defensa, pues priva al imputado de la posibilidad de conocer de antemano por
qué camino se conducirá la prueba en el proceso penal. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">De esta manera, la legítima protección
estatal de la mujer frente a los actos de violencia en razón de su género que
se pretende conseguir con la nueva redacción del artículo 80, no puede concebirse
a costa de privar al otro género humano de los principios básicos de la
libertad ciudadana. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 70.8pt;">
<span style="font-size: 13.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES-AR;">Por último, no quiero pasar por alto una
cuestión que estimo traerá consigo un profundo debate. El tipo penal como ha
sido redactado, discrimina ilegítimamente las conductas según si el sujeto
activo es hombre o mujer, reprimiendo solo aquellas realizadas por los primeros
mediando violencia de género, dejando así fuera de su alcance aquellas que, con
igual violencia y motivo, efectúe una mujer a un hombre, significando —o, al
menos, así pareciera querer significarlo— que la violencia de género puede
conducirse en un solo sentido, es decir, desde el hombre hacia la mujer,
apartándose de la realidad —histórica y actual— que nos demuestra que dentro
del catálogo de los conflictos existentes entre seres humanos, la violencia
proviene de uno u otro género de manera independiente. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div>
<!--[if !supportFootnotes]--><br clear="all" />
<hr align="left" size="1" width="33%" />
<!--[endif]-->
<br />
<div id="ftn1">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftnref1" name="_ftn1" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 10.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[1]</span></span><!--[endif]--></span></span></a>Senadorfilmus.com.ar/2011/04/femicidio-proyecto-de-ley-con-media-sancion-de-diputados/<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn2">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftnref2" name="_ftn2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 10.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[2]</span></span><!--[endif]--></span></span></a><span lang="ES"> <i>“</i></span><i>Contra la legalidad”</i>, de Alberto Bovino, publicado en Revista “No
hay derecho” Nº8, s. ed. Buenos Aires, 1992. <o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn3">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftnref3" name="_ftn3" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 10.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[3]</span></span><!--[endif]--></span></span></a><span lang="ES"> </span>Ídem anterior.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn4">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/DE%20LUCA..doc#_ftnref4" name="_ftn4" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES"><!--[if !supportFootnotes]--><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 10.0pt; line-height: 150%; mso-ansi-language: ES; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">[4]</span></span><!--[endif]--></span></span></a><span lang="ES"> </span>Ídem anterior.<o:p></o:p></div>
</div>
</div>
<br />
<br />Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/18214873259497938628noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-36138359989031124812012-08-15T14:14:00.001-07:002012-08-15T14:20:24.203-07:00VIVA LA PEPA... SIN OLVIDARNOS DEL PEPE<b style="text-align: justify;"><span lang="ES"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="color: #b45f06;">El control jurisdiccional a las
requisitorias del MPF en un sistema acusatorio de corte adversarial</span></span></span></b><br />
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify;">
<b><span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span style="color: white; font-size: large;"><br /></span></span></span></b></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify;">
<b><span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;"></span></span></b></div>
<div style="font-style: italic; margin: 6pt 0cm 0.0001pt; text-align: right;">
<b><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;">M. Boyer, con una balanza en la mano. La multi<b><span lang="ES"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"></span></span></b></span></b></div>
<div style="display: inline !important; margin: 6pt 0cm 0.0001pt;">
<b><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;"><b><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">tud ante su aparición llegó al delirio. M. Boyer se </span></b></span></b></div>
<b><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;">detuvo en lo alto de la escalera e hizo un gesto <b>para imponer silencio. Pronunció un discurso del </b><b>que Truddy sólo pudo comprender dos palabras </b><b>que se repetían sin cesar: «justicia» y «guillotina». </b><b>Las rejas cedieron ante el empuje de la muchedum</b><b>bre.</b><br />
</span></b><br />
<div style="margin: 6pt 0cm 0.0001pt; text-align: right;">
<b><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;"><b>(extracto del cuento "Los Chismorreos de la Mujer Sentada" en "LAS VIEJAS TRAVESTIS Y OTRAS INFAMIAS" de </b><b style="text-align: justify;"><span lang="ES"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;"></span></span></b></span></b></div>
<b><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;">
</span></b>
<br />
<div style="display: inline !important; margin: 6pt 0cm 0.0001pt; text-align: right;">
<b><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;"><b style="text-align: justify;"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;"><b>Copi)</b></span></b></span></b></div>
<b><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: x-small;">
</span></b>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">De la Inquisición perduran hasta nuestros días dos de
sus máximas fundamentales: <b>la
persecución penal publica de delitos</b> y <b>la
averiguación de la verdad histórica como meta directa del procedimiento penal</b>,
sobre cuyas bases se debe fundar la decisión final. Pero sabemos que estas
máximas “absolutas” se trasformaron en valores “relativos”, importantes en si,
pero superados en rango por ciertos atributos fundamentales de la persona humana.
Esos atributos fueron traducidos en reglas de garantías y derechos
individuales. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">En definitiva, se entiende así cómo estos valores
referidos a la dignidad humana individual fueron preferidos a la misma eficacia
de la persecución penal y a la posibilidad de averiguar la verdad, debiendo ser
observados aún a costa de estos principios<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn1" name="_ftnref1" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[1]</span></span></span></a>. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Es ello verdaderamente así: ¿Puede afirmarse realmente que la
averiguación de la verdad y la eficiencia de la persecución han dejado de ser
los principios rectores del sistema penal para dar mayor preponderancia a
aquellos valores respetuosos de las garantías y de la dignidad humana? <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span lang="ES">A raíz de una nota publicada tiempo atrás en el diario Clarín<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn2" name="_ftnref2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[2]</span></span></span></a>,
en la cual se menciona que </span><span lang="ES">el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires “logró <b>bajar sensiblemente los tiempos</b> de las
causas judiciales que se inician por denuncias de vecinos por delitos y
contravenciones” consiguiendo de este modo que de 70.000 denuncias recibidas
durante el año 2011 entre contravenciones y delitos, el 79% de las primeras
fueran resueltas en 21 días mientras que </span><span lang="ES">el
73% de los </span><span lang="ES">delitos</span><span lang="ES"> denunciados “tuvo una sanción a los 38 días, en
promedio”; algo </span><span lang="ES">quedó dando vueltas por nuestra
mente y creemos que dentro del esquema procesal actual tiene grandes
implicancias:<b> la facilidad del garante
de la persecución penal pública de llegar a la instancia del juicio<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn3" name="_ftnref3" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><b><span lang="ES">[3]</span></b></span></span></a>.
<o:p></o:p></b></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<b><u><span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Por ahí andaba la cosa…<o:p></o:p></span></span></u></b></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Enseña Julio Maier que, derivado de la necesidad de
afirmar la certeza sobre la existencia de un hecho punible, en el procedimiento
penal, la <i>carga de la prueba</i> de la
inocencia no le corresponde al imputado o, de otra manera, que la carga de
demostrar la culpabilidad del imputado le corresponde al acusador<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn4" name="_ftnref4" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[4]</span></span></span></a>. Señala
Maier que esto es así por dos cuestiones que son cruciales. Por un lado,
nuestra Constitución Nacional impide que se trate como culpable a una persona
hasta tanto el Estado no se pronuncie a través de una sentencia penal firme que
declare su culpabilidad. En segundo término, a partir de los principios de
oficialidad y legalidad procesal, el Estado crea ciertos órganos para llevar
adelante la persecución penal de manera exclusiva –salvo aquellos delitos de
acción privada- por lo que “la promoción del proceso constituye un deber para
el Ministerio Público Fiscal”<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn5" name="_ftnref5" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[5]</span></span></span></a>,
y como bien señala Levene (h) al analizar el artículo 71 del código de fondo en
materia penal “… la iniciación (de oficio de todas las acciones penales) a la
que se hace referencia quiere significar obligatoriedad…”<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn6" name="_ftnref6" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[6]</span></span></span></a>. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Es en esta última idea,
vinculada a la exclusividad y obligatoriedad del MPF en llevar adelante la
persecución penal, donde debe puntualizarse para lograr un examen crítico de su
función y su afán de perseguir, aunque de manera sistematizada y oportunista,
la totalidad de los hechos que según las políticas criminales de la época o los
“criterios generales de actuación”, deben ser criminalizados. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span lang="ES">El problema se origina en
determinar hasta qué punto puede el Estado –léase Ministerio Público Fiscal-
seguir ejerciendo la persecución<b>: ¿qué
control debe tener éste para continuar con la acción y cuáles son sus límites?</b>
</span><span lang="ES">Qué
grado de veracidad debe tener la imputación y qué pruebas deben ser aportadas
para poder estimar que con las mismas se llegará a un resultado justo; con qué
margen de arbitrariedad -entendemos aquí el termino como relacionado con la
libertad- puede el MPF seleccionar aquellos elementos (de prueba) con los que
llevará adelante la imputación y al mismo tiempo desecharlos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span lang="ES"> No pretendemos esbozar una idea de Fiscal
objetivo<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn7" name="_ftnref7" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[7]</span></span></span></a>.
Coincidimos con Bovino<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn8" name="_ftnref8" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[8]</span></span></span></a>
en que el rol del fiscal es difícilmente compatible con aquel que debe
adecuarse a aquella regla. No se trata de eliminarla sino, precisamente, que el
órgano con facultades decisorias pueda controlar la adecuación de la conducta
del fiscal a la mencionada regla </span><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn9" name="_ftnref9" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[9]</span></span></span></span></a><span lang="ES">.<o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<b><u><span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Ante todo… El de legalidad<o:p></o:p></span></span></u></b></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.25pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Creemos que existe la
posibilidad de poner un coto o límite a la actuación del MPF en aquellas etapas
del proceso denominadas instructoria e intermedia<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn10" name="_ftnref10" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[10]</span></span></span></a>.
<o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.25pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Aunque debemos admitir que de
este modo, corremos el riesgo de caer dentro de aquellas posturas que en los
últimos tiempos han generado que el juicio oral pierda centralidad y se bata
frente a otras alternativas que, como señala Pastor<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn11" name="_ftnref11" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[11]</span></span></span></a>,
aunque bienintencionadas, no hacen más que derogarlo y convertir lo que era un
principio cardinal del enjuiciamiento en una rara excepción. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">No pretendemos suprimir el
contradictorio ni menoscabar el acusatorio, sino dejar sentado que una mejor
eficiencia del sistema penal, debe tener como principio <b>el control de la actuación del ministerio público y la seriedad de sus
investigaciones</b>. Debe haber un control previo a la apertura del
procedimiento principal. El mismo debe estar orientado a evitar que, aquellos
casos en que la evidencia recabada no logra ser contundente, no lleguen a
juicio. Debe regularse un <b>sistema de
control jurisdiccional obligatorio por aplicación del principio de legalidad</b>
<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn12" name="_ftnref12" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[12]</span></span></span></a>.
<o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><span lang="ES">La decisión central del <b>procedimiento intermedio</b> debe versar
sobre la apertura o no de</span><span lang="ES">l</span><span lang="ES"> procedimiento principal, su fin
debe ser el control de los requerimiento del ministerio publico y su fundamento
debe ser el de evitar juicios mal provocados. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Debe analizarse si existe una
sospecha suficiente de que el imputado ha cometido el hecho punible
investigado. A pesar de lo señalado, la legislación no hace mención de los
requisitos materiales que debe cumplir la acusación, ni tampoco del grado de
conocimiento exigido para el progreso de la acción. Si bien el imputado tiene
la posibilidad de incorporar pruebas durante esta etapa, no la tiene para
acreditar los extremos que provoquen la paralización de la acción, que
acrediten su falta de fundamento o, al menos, que logren una modificación de la
imputación<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn13" name="_ftnref13" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[13]</span></span></span></a>.
Por otra parte, los jueces encargados de llevar adelante esta etapa deberían
tener la posibilidad de efectuar un control de la acusación, otorgándoles la
posibilidad de modificarla y no solo limitándolos a que las acepten, aun
aquellas que posean defectos importantes en alguna de sus partes. <o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">La falta de control de legalidad
provoca juicios que no deberían haber llegado a esa instancia y la perdida de
una oportunidad para el imputado de paralizar el progreso de la acción en su
contra.<o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<b><u><span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">El fin… Justifica los medios?<o:p></o:p></span></span></u></b></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">A modo de conclusión final
creemos que la seriedad del sistema debe enmarcarse dentro de los alcances de
la investigación preliminar<a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftn14" name="_ftnref14" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES">[14]</span></span></span></a>.
La euforia por el juicio no debe conducir, como lo es entre los enamorados del
acusatorio a ultranza, a que todos los casos, a partir de una liviana
investigación, vayan a parar a la vista. Dentro de la perspectiva del<b> proceso como técnica de averiguación</b>-dice
Andrés Ibañez- “la fase de investigación o de instrucción debería ser sólo
momento de elaboración de hipótesis e individualización de posibles fuentes de
prueba, idealmente destinadas a ser objeto de una evaluación del posible
rendimiento; para, en función de éste, en su caso, ser propuestas y en su día
llevadas a juicio de la manera mas genuina, para, dentro de él, ser sometidos a
una valoración contradictorio”.<o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">La clave parece estar allí, en
lo manifestado por el magistrado español. Ya que como señala Pastor prologando
aquella obra, “esa evaluación servirá para desechar lo que no asegure que el
sufrimiento del imputado en el juicio esté justificado por la verificación con
cierto detenimiento de la concurrencia de las circunstancias que avalan una
acusación”.<o:p></o:p></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white;"><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Creemos que la verdadera
eficiencia del sistema procesal es aquella que incluye el reconocimiento de las
garantías. La eficiencia no es la de cualquier tipo de proceso con tal que haya
una mayor represión –en sentido amplio-, sino la de un proceso que permita
alcanzar resultados creíbles, no dibujados por estadísticas comerciales
provenientes de un Ministerio Público, desde el cual lo eficaz viene marcado
por la cantidad de casos llevados a juicios. Aquellos resultados deben ser
logrados de un modo justo, </span><b><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">que se
absuelva a los inocentes y se condene a los culpables, dentro de un marco
estrictamente respetuoso de las garantías constitucionales.</span></b></span></span><br />
<span lang="ES" style="background-color: black;"><span style="color: white;"><b><span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><br /></span></b></span></span>
<br />
<div style="text-align: right;">
<span style="color: white; font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><b style="background-color: black;">Catriel Rebón</b></span></div>
</div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 6.0pt; text-align: justify; text-indent: 26.95pt;">
<div style="text-align: right;">
<br /></div>
</div>
<div>
<span style="background-color: black; color: white;"><br clear="all" />
</span><br />
<hr align="left" size="1" width="33%" />
<div id="ftn1">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref1" name="_ftn1" title=""><span lang="ES" style="font-size: 8.0pt;"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: AR-SA;">[1]</span></span></a><span lang="ES" style="font-size: 8.0pt;"> MAIER, Julio B. J, Derecho Procesal Penal, Tomo I, “Fundamentos”,
Editores del Puerto SRL, año 1999, 2º Edición, pág. 742, 743.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn2">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref2" name="_ftn2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[2]</span></span></span></span></a><span lang="ES" style="font-size: 8.0pt;"> </span><span lang="ES"><a href="http://www.clarin.com/ciudades/Agilizan-tramites-resuelven-causas-judiciales_0_700730004.html"><span style="font-size: 8.0pt;">http://www.clarin.com/ciudades/Agilizan-tramites-resuelven-causas-judiciales_0_700730004.html</span></a><a href="http://www.clarin.com/ciudades/Agilizan-tramites-resuelven-causas-judiciales_0_700730004.html"></a><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn3">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref3" name="_ftn3" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt;"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[3]</span></span></span></span></a><span lang="ES" style="font-size: 8.0pt;"> Si bien se hace mención a las grandes
herramientas con las que cuenta el MPF para lograr este resultado (justo?) -la
mal llamada probation y el tan cuestionado juicio abreviado-, lo cierto es que
aquellos institutos se utilizan, en gran medida, una vez que la causa ha
superado la instancia denominada investigación penal preparatoria.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn4">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref4" name="_ftn4" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[4]</span></span></span></span></a><span lang="ES" style="font-size: 8.0pt;"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES; mso-bidi-language: AR-SA; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: AR-SA;">[4]</span> MAIER, Julio B. J, Derecho Procesal Penal,
Tomo I, “Fundamentos”, Editores del Puerto SRL, año 1999, 2º Edición, pág.
505/506.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn5">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref5" name="_ftn5" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[5]</span></span></span></span></a><span lang="ES" style="font-size: 8.0pt;"> D`ALBORA, Francisco J, “Código Procesal de la Nación,
Anotado, Comentado, Concordado. Octava edición corregida, ampliada y
actualizada por Nicolás F. D`ALBORA”. Editorial AbeledoPerrot, año 2009,
comentario al articulo 5º, pag. 23. </span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn6">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref6" name="_ftn6" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[6]</span></span></span></span></a><span style="font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">LEVENE, citado en la obra a la
que se hizo mención en la nota anterior.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn7">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref7" name="_ftn7" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[7]</span></span></span></span></a><span style="font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">Resulta interesante destacar
que en el procedimiento estadounidense, en el cual el fiscal posee un rol
efectivamente acusatorio éste último tiene la obligación de, si en el
transcurso de la investigación recolectara pruebas que puedan ser de utilidad
para la defensa las cuales llevarían a una posible desincriminación, hacerle
saber a ella de la existencia de las mismas bajo riesgo de que la eventual
condena pueda ser revocada. De esta manera parecería que el Fiscal no deja de
llevar adelante la acusación pero al mismo tiempo tiene la obligación de
posibilitar, ya que la defensa analizará la utilidad de tales pruebas, el
efectivo ejercicio del derecho de defensa. Algo similar puede verse en el artículo
206 del CPPCABA el cual prescribe en su último párrafo que “El/la Fiscal no
podrá ocultar a la defensa la existencia de pruebas en contra o a favor del/la
imputado/da”.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn8">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref8" name="_ftn8" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[8]</span></span></span></span></a><span style="font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">BOVINO, Alberto, “EL NUEVO
CODIGO PROCESAL DE LA NACIÓN, Análisis Crítico”, Compilador Julio B. J. Maier,
Ediciones del Puerto, año 1993, artículo titulado “El Debate”, pag. 182.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">El Código Procesal de la Ciudad de Buenos Aires
intenta dar una visión objetiva del Ministerio Publico Fiscal, es tan así que
en su artículo 5º declara:</span><span lang="ES" style="font-size: 8.0pt;"> “En el
ejercicio de su función el Ministerio Público Fiscal <i>adecuará sus actos a un criterio objetivo y velará por el cumplimiento
efectivo de las garantías</i> que reconocen la Constitución Nacional, la
Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los tratados
internacionales de derechos humanos ratificados por nuestro país y la ley.
Investigará las circunstancias que permitan comprobar la acusación <i>y las que sirvan para eximir de
responsabilidad al/la imputado/a y formular los requerimientos e instancias
conforme a ese criterio de objetividad</i>”.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn9">
<div class="MsoFootnoteText">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref9" name="_ftn9" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 10pt;">[9]</span></span></span></span></a><span lang="ES"> <o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn10">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref10" name="_ftn10" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[10]</span></span></span></span></a><span style="font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;"> Específicamente legislada en
el artículo 210 del CPPCABA, el cual establece que “Ofrecida la prueba por la
defensa, el/la Juez/a convocará a las partes a una audiencia dentro de los diez
(10) días. Con las partes que concurran resolverá sobre la admisibilidad de las
pruebas ofrecidas por todas ellas, previo escucharlas sobre su procedencia,
improcedencia y/o inadmisibilidad. Solo podrá rechazar por auto aquellas que
considere manifiestamente improcedentes o inconducentes y las que sean
inadmisibles conforme las disposiciones de este Código. La decisión será
irrecurrible, pero podrá ser invocada como fundamento del recurso de apelación
contra la sentencia definitiva. Concluido el acto, el/la Juez/a remitirá el requerimiento
de juicio y el acta de la audiencia; para que se designe el/la Juez/a que
entenderá en el juicio. No se remitirá el legajo de investigación del/la Fiscal
ni otras actuaciones que no sean aquellas que se acordó incorporar al debate y
las actas labradas respecto de actos definitivos e irreproducibles. En la
audiencia se podrán interponer excepciones, formular acuerdo de avenimiento y
solicitar y resolver la suspensión del proceso a prueba. De lo actuado se
dejará constancia en acta.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn11">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref11" name="_ftn11" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[11]</span></span></span></span></a><span style="font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">PASTOR, Daniel R., “Prueba y
convicción judicial en el proceso penal”, Perfecto Andrés Ibáñez, Editorial
Hammurabi, año 2009, prólogo, páginas 18/19.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn12">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref12" name="_ftn12" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[12]</span></span></span></span></a><span style="font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR;">ALVAREZ, Alejandro E., “EL
NUEVO CODIGO PROCESAL DE LA NACIÓN, Análisis Crítico”, Compilador Julio B. J.
Maier, Ediciones del Puerto, año 1993, artículo titulado “El control
jurisdiccional de los requerimientos acusatorios o conclusivos del Ministerio
Público”, pag. 157.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn13">
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 0cm; text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref13" name="_ftn13" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[13]</span></span></span></span></a><span style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-ansi-language: ES-AR; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";">Idem. Pag. 158.</span><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 8pt;"> <span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></span></div>
<div style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; margin-left: 0cm; margin-right: 2.2pt; margin-top: 0cm; text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";">Debe
aclararse que en el CPPCABA, las posibilidades de control del requerimiento de elevación
que tiene la defensa se encuentran más limitadas que en la normativa de forma
nacional. En la audiencia establecida en el artículo 210, solo se otorga la
posibilidad de interponer excepciones, formular acuerdos de avenimiento y
solicitar resolver la suspensión del proceso a prueba. Además, la admisibilidad
o no de la prueba ofrecida no será recurrible y solo podría ser invocada como
fundamento del recurso de apelación contra la sentencia definitiva (obviamente
después de que se haya realizado el juicio).</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></div>
</div>
<div id="ftn14">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><a href="file:///C:/Users/Catriel/Documents/Art%C3%ADculo%20de%20Cato%20para%20el%20blog%20con%20correcciones.docx#_ftnref14" name="_ftn14" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-family: "Calibri","sans-serif"; font-size: 8.0pt; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">[14]</span></span></span></span></a><span lang="ES" style="font-size: 8pt;">Tomamos aquí las ideas del magistrado del Tribunal
Superior español, doctor Perfecto Andrés Ibañez, delineadas en el libro </span><span style="font-size: 8pt;">“Prueba y convicción judicial
en el proceso penal”, Perfecto Andrés Ibáñez, Editorial Hammurabi, año 2009,
prólogo de Daniel R. Pastor</span></span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></div>
</div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/16317425336125652175noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-1984912511692933652012-07-20T08:31:00.001-07:002012-07-20T08:31:37.251-07:00SIN JURISDICCIÓN EN EL SALÓN AZUL: DEBATE SOBRE ABORTO A LA LUZ DEL FALLO F.A.L<span style="background-color: black; color: white;"><br /></span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<div style="text-align: right;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="background-color: black; color: white; font-size: small; line-height: normal; text-indent: 47.20000076293945px;">Julia Baliña y Mercedes Colombo Sacriste</span></span></div>
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">INTRODUCCIÓN<o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">El día jueves 21 de junio de 2012 a
las 18.30 hs., en el Salón Azul de la Facultad de Derecho de la UBA, se llevó a
cabo un debate al que asistió Sin Jurisdicción. El eje del mismo fue el
análisis de los casos de aborto no punible a la luz del reciente fallo de la
Corte Suprema de Justicia <a href="http://www.infojus.gov.ar/archivo.php?archivo=fal.pdf" target="_blank">“F.A.L.”</a>.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Los expositores – según su orden –
fueron:<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 70.8pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Santiago Legarre (Profesor de Derecho
Constitucional - UCA / Investigador del CONICET)<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 70.8pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Martín Farrell (Profesor Emérito de
la UBA - Profesor de la UP / Investigador del Instituto Gioja)<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-left: 70.8pt; text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Paola Bergallo (Profesora en el
Departamento de Derecho - UdeSA / Investigadora del CEDES)<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">En este post, intentaremos en primer
lugar sintetizar cuáles fueron las posturas de cada uno de los ponentes; luego,
trataremos de dar una opinión breve acerca de lo que a nosotros nos pareció el
debate; y por último, dejaremos algunas preguntas abiertas para que quien
quiera y se anime, las conteste, invitando a un posible nuevo debate, pero esta
vez en este medio.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b><span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">QUÉ DIJO QUIÉN<o:p></o:p></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">Santiago Legarre fue el encargado de
abrir el debate y, para ser sinceros con nosotros mismos y con ustedes, no
quedaba en un principio muy claro a qué iba a apuntar. Comenzó refiriéndose a
un antecedente jurisprudencial del año 1993, llamado “Rodríguez c/ Compañía
Embotelladora Argentina S.A. y otro” – ver </span><a href="http://www.legislaw.com.ar/legislaw/leyes21.html#CSJN" style="text-indent: 35.4pt;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">aquí</span></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;"> –, donde, como asistente de la C.S.J.N.
de por aquel entonces, advirtió que existía una cuestión de previo y especial
pronunciamiento que consistía en determinar si acaso la Corte tenía competencia
para expedirse sobre una norma de derecho común como la que se trataba en el
caso sometido a su análisis – el caso discutía la interpretación del art. 30 de
la Ley de Contrato de Trabajo -, teniendo en cuenta para ello lo establecido
por el artículo 15 de la Ley 48.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"> La Corte al expedirse dio lugar –
según el Dr. Legarre – a gran cantidad de críticas posteriores basadas –
justamente – en haberse expedido cuando
– según algunos - no debía haberlo hecho por carecer de competencia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Luego, en el año 2009, la misma
cuestión fue sometida al análisis de la C.S.J.N. pero esta vez, con una
composición diferente, se sostuvo precisamente que al tratarse el art. 30 de la
L.C.T. de una norma de derecho común, no tenía ella competencia para
pronunciarse en el caso. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Hasta aquí, puede que como a nosotros
aún no les quede claro el punto al que intenta arribar el Dr. Legarre. Pues
bien, él sostiene que en “F.A.L.” como en “Rodríguez” la C.S.J.N. debió
analizar primero si tenía competencia para expedirse en el caso sometido a su
análisis por aplicación del art. 15 de la Ley 48.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Así, Legarre sostuvo en su exposición
que la C.S.J.N. debió abstenerse de pronunciarse en el caso F.A.L. – como debió
abstenerse en Rodríguez - toda vez que el art. 86 del C.P. resulta ser una
norma del derecho común y no federal, por lo que está fuera de su competencia.
Entendió el ponente que la Corte no sólo realizó una actividad que le estaba
vedada, sino que además, no avaló ni criticó la interpretación del Tribunal
Superior de Chubut y formuló su propia interpretación del artículo en crisis.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">En este sentido, el expositor destacó
el voto de la Ministra Argibay, donde se menciona que el máximo Tribunal no
tendría competencia para interpretar la norma. Asimismo,
consideró que el Ministro Petracchi va más allá que Argibay al desestimar
directamente el recurso, con fundamento en que “<i>...el fallo apelado se sustenta autónomamente en legislación común
nacional que no ha sido atacada de inconstitucional, razón por la cual carece
el recurso del requisito de relación directa e inmediata que debe existir entre
las cuestiones federales propuestas y lo decidido por el pronunciamiento”</i>
(Considerando nro. 12 del voto de Petracchi)<i>.<o:p></o:p></i></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Resumidamente – aunque no lo parezca
– esto fue a nuestro criterio el eje de la exposición del Dr. Legarre.-<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">A continuación, el Dr. Martín Farrell
inició su exposición planteando la existencia de dos problemas. En primer
lugar, la determinación del alcance del art. 86 inciso 2° del C.P. y, en
segundo lugar, si la interpretación arribada previamente viola o no algún
derecho o garantía.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Sostuvo el ponente sobre la primera
cuestión, que el supuesto abarca todos los casos de violación y que, esa
interpretación no tiene obstáculo constitucional alguno, refiriendo a su vez
que el fundamento para tal decidir radica precisamente en cuestiones
ideológicas y morales. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Se preguntó si acaso había algún
problema en que la C.S.J.N. haga política – asumimos que entiende que con este
fallo lo hizo -, contestando que, por un lado, no tenía más remedio y, por el
otro, que debía hacer una lectura moral del caso. Y recalcó la palabra “debía”,
pues sostuvo que el derecho debe ser capaz de soportar el escrutinio de la
moral mas no, el de la religión, toda vez que la moral requiere de fundamentos
y la religión de dogmas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Sostuvo entonces que la lectura del
aborto es una lectura explícitamente moral – aunque haya quienes sostengan lo
contrario -, y que la Corte tuvo para decidir como lo hizo como argumento
fundamental la idea de que: no se le puede exigir a una mujer que realice, en
beneficio de otras o de un bien colectivo, el sacrificio de tener que soportar
un embarazo producto de una violación.[1]<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">En este sentido, sostuvo que la
lectura que se haga sobre el aborto, debe ser una lectura explícitamente moral
pese a que existan posiciones que sostengan lo contrario. Y que la Corte tuvo
en cuenta al momento de resolver, la idea fundamental de que: no se le puede
exigir a una mujer un sacrificio de tal magnitud, en nombre de una entidad
común como lo es la sociedad. Una mujer que tolera un embarazo de nueve meses,
merece ser elogiada, pero no podemos obligarla a hacerlo si esa no es su
voluntad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Dijo que el derecho no legisla para
santos ni mártires – frase que compartimos – y para explicarse aún mejor,
recurrió al ejemplo del violinista de Judith Thomson [2].
Sostuvo que si bien sería muy bueno que una persona – como en el ejemplo -
continúe conectada a otra para salvarle la vida, no puede ello serle obligado
pues hay que distinguir entre aquellos actos que son obligatorios, de aquellos
que son supererogatorios. Estos últimos, son actos que van más allá de lo exigido,
superan el deber y bajo ningún aspecto pueden ser exigidos a las personas, a
pesar de ser valorados positivamente en caso de realizarse.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">También, señaló que la C.S.J.N.
guardó silencio en punto a si el feto es o no persona pues – aunque se sostiene
que el feto es persona – igualmente la mujer violada tendría derecho a poder
decidir si llevar o no adelante el embarazo. Por otra parte, indicó que hubiera
sido de su preferencia que la Corte indique plazos y que para su fijación se
tuviera en cuenta el tiempo del embarazo. Sin embargo, aclaró que el hecho de
que el Tribunal no los haya fijado, no puede considerarse inconstitucional. Más
aun, afirmó que pueden existir diversas interpretaciones en relación a los
plazos a fijar. Sostuvo además, que la vida humana se evalúa en términos de
valor, valor que a su criterio va aumentando con el transcurso de la gestación.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">A partir de una pregunta que se le
formulara luego de la exposición, habló también de la autonomía de las
personas, de la diferenciación con la interdependencia, como así también, de la
problemática de los estados paternalistas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Luego fue el turno de la Dra. Paola
Bergallo, quien hizo hincapié en que la C.S.J.N. hizo justamente lo que se
supone que un Máximo Tribunal debe hacer: no esconderse ante la realidad
social, política e ideológica actual. A su vez, redefinió a su criterio el rol
de la interpretación constitucional como mucho más sensible a los derechos, a
la realidad social y a la política de un país. El fallo – a su criterio - da
cuenta de jueces sensibles a la realidad social, ideológica y política del
derecho en la Argentina.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">La ponente recalcó que no sólo se
dieron argumentos jurídicos, morales y constitucionales para decidir como se
hizo, sino que además se hicieron consideraciones fácticas que dieron cuenta de
la existencia de prácticas <i>contra legem</i>,
refiriéndose al contexto institucional donde no hay posibilidad de abortar en
los casos permitidos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Sostuvo que también se reconoció la
existencia de un activismo restrictivo por parte del sistema judicial y de
salud, en el sentido de un vallado que
obstruye activamente la práctica del aborto en casos como el de A.G. Es
decir, no solo afirma que existe en la Argentina un sistema de salud que no
ofrece opciones de aborto no punibles, sino que además hay trabas al acceso de
esas opciones.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Resaltó que éste análisis de la Corte
muestra que al momento de fallar no solo se pensó en el texto de la ley sino
también en la práctica, en la realidad del ejercicio mismo del permiso.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">La Dra. Bergallo advirtió que el
fallo puso especial énfasis en la desinformación existente en el sistema de
salud y en el estado de incertidumbre
preponderante.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Por último, mencionó otras cuestiones
importantes del fallo como: la no judicialización de los abortos no punibles;
la imposibilidad de exigir la denuncia penal; la necesidad de que los servicios
para este tipo de prácticas deben ser rápidos y sin dilaciones; la necesidad de que
sean médicos quienes intervengan en las prácticas y no comités
interdisciplinarios; la exhortación a regulación de requisitos y mecanismos
para los casos de objeción de conciencia como asimismo, la exhortación al
desarrollo de políticas de violencia y la proporción de información, entre
otras cosas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<b><span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<b><span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">NUESTRA OPINIÓN<o:p></o:p></span></b><br />
<b><span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></b><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmST5w1f0ARXRxu2O83n2UBjg-Wz_zUoovwZB9klnSh2vSRWsJ_J15beN8syyL8bA79y5rNzRLa0zXZ0hsmcPNmWa2oeMN3LiD6m3AnafOHXYWr02crS2aL3qVe16DWZybJgcLvaudCSGC/s1600/SIoNO.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmST5w1f0ARXRxu2O83n2UBjg-Wz_zUoovwZB9klnSh2vSRWsJ_J15beN8syyL8bA79y5rNzRLa0zXZ0hsmcPNmWa2oeMN3LiD6m3AnafOHXYWr02crS2aL3qVe16DWZybJgcLvaudCSGC/s1600/SIoNO.jpg" /></a></div>
<b><span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">En cuanto a la calidad del debate
creemos que fue muy enriquecedor, pues los ponentes tuvieron diversos enfoques
sobre el tema de análisis al momento de realizar su exposición.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Compartimos sobretodo la lectura del
Dr. Farrel, y ello pues nos llevó a pensar sobretodo ¿Qué tipo de Estado
queremos? Y además, porque puso sobre la mesa la circunstancia de que aun sosteniendo
que el feto es persona, ello no resulta óbice suficiente para negar a la mujer
la posibilidad de interrumpir, de manera accesible, rápida y segura, un embarazo cuando es producto de
una violación. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Entendemos que tanto en el fallo como
en la lectura que hace el ponente del mismo, se reconoce – y se pondera – el
derecho de la mujer a decidir qué hacer y a poder elegir; y que, ante esa
decisión – cualquiera sea –haya un Estado que brinde protección a la intimidad y una atención médica integral.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;">La Corte Suprema amplía los términos
de su pronunciamiento pues entiende que es “oportuno y necesario” ante la
situación actual de desinformación. A través de su decisión intenta “esclarecer
la situación… y evitar frustraciones de derecho…”. En la misma inteligencia,
para todos aquellos que, o bien no puedan leer completo el fallo, o no quieran,
la conclusión del mismo sería que:<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoListParagraphCxSpFirst" style="margin-left: 53.4pt; mso-add-space: auto; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">1)<span style="font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">La
interrupción de un embarazo que sea consecuencia de una violación – sin
perjuicio de la capacidad mental de su víctima –, <u>no es punible.<o:p></o:p></u></span></span></div>
<div class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="margin-left: 53.4pt; mso-add-space: auto; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">2)<span style="font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">No
existe en la legislación argentina norma alguna que obligue a la mujer o a su
representante a pedir autorización judicial. Tal petición es una práctica <i>contra legem.</i><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="margin-left: 53.4pt; mso-add-space: auto; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">3)<span style="font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Para
acceder al aborto en caso de violación solo se requiere que la víctima del
delito, o su representante, manifiesten el hecho ilícito ante el profesional
tratante mediante declaración jurada.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoListParagraphCxSpLast" style="margin-left: 53.4pt; mso-add-space: auto; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">4)<span style="font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">No
se requiere que la mujer que diga ser víctima de una violación lo denuncie ni
tampoco se requiere su determinación judicial.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;"><br /></span><br />
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">A modo de cierre, los invitamos a discutir
sobre la siguiente pregunta que nos quedó pendiente de hacer durante el debate,
ella es: </span><span style="line-height: 18px; text-indent: 35.4pt;">¿cuáles serian los argumentos morales y jurídicos para reconocer o limitar el derecho de la mujer de autodeterminación sobre su propio cuerpo, </span><span style="line-height: 18px; text-indent: 35.4pt;">para los supuestos de embarazos que no son producto de una violación?</span><span style="line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="background-color: black; color: white; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span><br />
<div style="text-align: right;">
<span style="background-color: black; color: white;"><br /></span></div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">[1] <b>Considerando nro. 16 del voto de la mayoría:</b></span><span style="line-height: 18px;"> Que por lo demás, de la dignidad de las personas, </span><span style="line-height: 18px;">reconocida en varias normas convencionales (artículo 11 de la </span><span style="line-height: 18px;">Convención Americana sobre Derechos Humanos; artículo 1º, Declaración </span><span style="line-height: 18px;">Universal de los Derechos Humanos; y Preámbulos del Pacto </span><span style="line-height: 18px;">Internacional de Derechos Civiles y Políticos y de la Declaración </span><span style="line-height: 18px;">Americana de los Derechos y Deberes del Hombre), se desprende </span><span style="line-height: 18px;">el principio que las consagra como un fin en sí mismas y </span><span style="line-height: 18px;">proscribe que sean tratadas utilitariamente. Este principio de </span><span style="line-height: 18px;">inviolabilidad de las personas impone rechazar la exégesis restrictiva </span><span style="line-height: 18px;">de la norma según la cual ésta sólo contempla, como un </span><span style="line-height: 18px;">supuesto de aborto no punible, al practicado respecto de un embarazo </span><span style="line-height: 18px;">que es la consecuencia de una violación a una incapaz </span><span style="line-height: 18px;">mental. En efecto, la pretensión de exigir, a toda otra víctima </span><span style="line-height: 18px;">de un delito sexual, llevar a término un embarazo, que es la </span><span style="line-height: 18px;">consecuencia de un ataque contra sus derechos más fundamentales, </span><span style="line-height: 18px;">resulta, a todas luces, desproporcionada y contraria al postulado, </span><span style="line-height: 18px;">derivado del mencionado principio, que impide exigirle a las </span><span style="line-height: 18px;">personas que realicen, en beneficio de otras o de un bien colectivo, </span><span style="line-height: 18px;">sacrificios de envergadura imposible de conmensurar (cfr. </span><span style="line-height: 18px;">Nino, Carlos Santiago, Ética y Derechos Humanos, Editorial </span><span style="line-height: 18px;">Paidós, Buenos Aires, 1984, págs. 109 y ss.; La legítima defensa, </span><span style="line-height: 18px;">Fundamentación y régimen jurídico, Editorial Astrea, Buenos </span><span style="line-height: 18px;">Aires, 1982, págs. 59, 63 y ss.).</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="background-color: black; color: white;"><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">[2] <b>El ejemplo de Thomson:</b> </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Usted se despierta una mañana y se encuentra en la cama con
un violinista inconsciente. Un famoso violinista inconsciente. Se le ha
descubierto una enfermedad renal mortal, y la Sociedad de Amantes de la Música
ha consultado todos los registros médicos y ha descubierto que sólo usted tiene
el grupo sanguíneo adecuado para ayudarle. Por consiguiente le han secuestrado,
y por la noche han conectado el sistema circulatorio del violinista al suyo,
para que los riñones de usted puedan purificar la sangre del violinista además
de la suya propia. Y el director del hospital le dice ahora a usted: “Mire,
sentimos mucho que la Sociedad de Amantes de la Música le haya hecho esto,
nosotros nunca lo hubiéramos permitido de haberlo sabido. Pero, en fin, lo han
hecho, y el violinista está ahora conectado a usted. Desconectarlo significaría
matarlo. De todos modos, no se preocupe, sólo es por nueve meses. Para entonces
se habrá recuperado de su enfermedad, y podrá ser desconectado de usted sin
ningún peligro” (Thomson1971: 11). </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">La misma autora aclara en relación con su analogía: </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">...en este caso usted fue secuestrado, usted no se brindó
para la operación que conectaba el violinista a sus riñones. ¿Pueden aquellos
que se oponen al aborto sobre la base que antes mencioné exceptuar el embarazo
debido a una violación? (Thomson 1992: 12)</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/16317425336125652175noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-43465167373307368152012-07-10T18:53:00.000-07:002012-07-10T19:18:06.552-07:00REAFIRMANDO A LA LESIVIDAD COMO UN FILTRO REDUCTOR PUNITIVO EN UN MODELO GARANTISTA DE DERECHO<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: right;">
</div>
<div align="right" class="MsoNormalCxSpFirst" style="line-height: normal; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">por Mauro <span style="font-variant: small-caps;">Lopardo</span><o:p></o:p></span></span></div>
<div align="right" class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Un esquema finalista de lógica reductora de la
pretensión punitiva estatal, a la luz de los principios filosóficos y
políticos-liberales de la <i>última ratio</i>,
indefectiblemente tiene un único punto de partida: sin duda alguna, es el axioma
conocido como “<i>nulla necesitas sine
iniuria</i>”.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Ésta máxima latina, también conocida como principio
de lesividad (o de la ofensividad del acto)<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn1" name="_ednref1" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[1]</span></span></span></a>,
conforme a un sistema de justicia penal de tipo garantista, determina que no se
pueden considerar penalmente típicas aquellas acciones humanas que <i>per se</i> no ponen en peligro o afectan
concretamente un bien jurídico.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">El profesor <span style="font-variant: small-caps;">Ferrajoli
</span>entiende que la lesividad, como garantía sustancial, afecta al contenido
en sí de las prohibiciones normativas permitidas, es decir, que opera como un
presupuesto de la pena<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn2" name="_ednref2" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[2]</span></span></span></a>.
Esto quiere decir que no puede haber imposición de castigo penal si antes no
hubo -en forma cierta- una demostración acabada sobre la producción de un
resultado lesivo (o puesta en peligro <i>seria</i>)
sobre un bien jurídico tutelado penalmente y su atribución directa a un sujeto
en particular en calidad de autor material penalmente responsable; de no
demostrarse ello, su consecuencia directa es la vigencia del estado de
inocencia y la absoluta obstaculización del poder punitivo. Esta carga de la
prueba, sin lugar a dudas, incumbe a la autoridad estatal, y es necesaria, no
sólo a los fines de la reprochabilidad en sí, sino también porque hace a la
graduación de una posible condena a imponer en consideración del grado de
injerencia. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Sobre este aspecto me enfocaré. Sabemos que el
derecho penal es un remedio extremo, y que la relevancia jurídica en sentido
penal de las conductas ilícitas, frente a los diversos niveles de afectación a
bienes protegidos, queda demarcada por el sistema de escalas punitivas que toda
normativización estatal delimita legalmente. Algo básico: a mayor afectación,
mayor pena<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn3" name="_ednref3" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[3]</span></span></span></a>;
a menor afectación, menor pena (o podría quizás ni ser necesaria la intervención
represiva).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Entonces, aquellas conductas humanas que, por
circunstancias ajenas a la voluntad del autor, no logren el producir resultado
pretendido, pero sí una puesta en peligro seria, de pretenderse normativamente
su castigo penal, necesariamente debe ser menor su escala penal que aquella que
idealmente pudo haber sido determinada para los casos de consumación delictual.
Esto es justamente lo que postula la teoría objetiva sobre la tentativa,
criterio coincidente con nuestro sistema normativo (Título VI del Código Penal
de <st1:personname productid="la Nación" w:st="on">la Nación</st1:personname>).<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Al respecto, <span style="font-variant: small-caps;">Zaffaroni</span>
explica que se trata de la tesis que mayores garantías ofrece en cuanto a su
respeto por el principio de lesividad, pues su consecuencia necesaria es que la
pena de la tentativa sea inferior a la del delito consumado, porque el peligro
del resultado siempre importa un injusto menor que su advenimiento<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn4" name="_ednref4" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[4]</span></span></span></a>.
<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Hecha esta breve referencia conceptual, parecería no
haber ningún tipo de duda sobre los presupuestos de punibilidad frente a los
casos de tentativa en nuestro sistema normativo. Lamentablemente esto no es
así. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Recientemente, los jueces integrantes de <st1:personname productid="la Sala II" w:st="on">la Sala II</st1:personname> de <st1:personname productid="la CFCP" w:st="on">la CFCP</st1:personname> tuvieron en sus manos el
caso “<span style="font-variant: small-caps;"><a href="http://www.pensamientopenal.com.ar/articulos/contrabando-tentativa-equiparacion-al-delito-consumado-inconstitucionalidad-pena">Ortuño</a></span>”<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn5" name="_ednref5" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[5]</span></span></span></a>,
y con ello, la oportunidad de tomar las riendas del garantismo penal y dictar una
sentencia acorde a los postulados propios de un derecho penal liberal. <i>Por suerte, así lo han hecho<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn6" name="_ednref6" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><b><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[6]</span></b></span></span></a></i>:
el Tribunal Oral en lo Penal Económico nº3 de esta ciudad condenó a Fabiana
Nair Ortuño Saavedra como autora penalmente responsable del delito de
contrabando agravado por tratarse de estupefacientes inequívocamente destinados
a su comercialización, en grado de tentativa en concurso real -dos hechos-<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn7" name="_ednref7" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[7]</span></span></span></a>.
Dicho resolutorio fue recurrido por la defensa: en primer lugar, impugnó la
validez de la sentencia; en segundo término, sostuvo que los jueces incurrieron
en un <i>vicio in iudicando<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn8" name="_ednref8" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><b><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[8]</span></b></span></span></a></i>;
por último, solicitó se declare la inconstitucionalidad de los artículos 871 y
872 del Código Aduanero, con fundamento en el voto del juez <span style="font-variant: small-caps;">Zaffaroni </span>en el caso “<span style="font-variant: small-caps;">Branchessi</span>”. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">A ésta última cuestión me circunscribiré. El art. 872
del Código Aduanero dispone que “<i>la tentativa de contrabando será reprimida con
las mismas penas que corresponden al delito consumado</i>”, y como bien lo
señala <st1:personname productid="la Dra. LEDESMA" w:st="on">la Dra. <span style="font-variant: small-caps;">Ledesma</span></st1:personname>, la cuestión
radica en dilucidar si dicha equiparación punitiva ante injustos que alcanzan
una disímil entidad lesiva del bien jurídico en juego logra armonizar con los
postulados constitucionales. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><i><span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;">Claramente
no</span></i><span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;">. Entonces expuso:<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormalCxSpMiddle" style="line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 1.0cm; margin-right: 1.0cm; margin-top: 0cm; mso-add-space: auto; text-align: justify;">
<i><span lang="ES-AR"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“…la acción que será castigada debe ser valorada
exclusivamente en el marco del hecho seleccionado, no será lo mismo un riesgo
que un resultado (…) y por tal razón el
castigo de la tentativa <b>deberá ser siempre menor</b>
(proporcionalidad) (…). <b>La tentativa
deberá ser siempre una forma menor de punición</b>…<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormalCxSpMiddle" style="line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 1.0cm; margin-right: 1.0cm; margin-top: 0cm; mso-add-space: auto; text-align: justify;">
<i><span lang="ES-AR"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">(…)<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 6.0pt; margin-left: 1.0cm; margin-right: 1.0cm; margin-top: 0cm; text-align: justify;">
<i><span lang="ES-AR"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">…no se puede desconocer
que un delito tentado provoca un conflicto de menor entidad que el que provoca
uno que alcanza el grado de consumación y esto no puede generar la misma
respuesta punitiva”.<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Su ejercicio silogístico consistió en interpretar
armónicamente los principios de lesividad, el de proporcionalidad de las penas
y el de culpabilidad por el hecho, ya que, a su entender, permiten establecer
una diferencia entre la acción de contrabando consumada de la que queda en
grado de conato, lo cual demuestra –a claras luces- que la norma prevista en el
artículo 872 del Código Aduanero, al
igualar situaciones desiguales, no logra traspasar el tamiz constitucional.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 140%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES-AR" style="line-height: 140%;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">En definitiva, el Juez no debe ser concebido como un
operador de carácter pasivo o como un simple oráculo viviente de la ley<a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_edn9" name="_ednref9" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[9]</span></span></span></a>,
todo lo contrario, pues él, en su praxis funcional como garante de <st1:personname productid="la Constitución Nacional" w:st="on">la Constitución Nacional</st1:personname>,
es quien realmente tiene la potestad de ajustar casuísticamente el sentido
material de la ley en lo estrictamente necesario, y siempre que existan
discrepancias conceptuales entre normas constitucionales y aquellas de inferior
jerarquía. Ésta debe ser la concepción de realismo jurídico que debe impregnar
socialmente acorde a los cimientos filosóficos propios de un Estado democrático
y social de Derecho.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><i><span lang="ES-AR" style="line-height: 150%;">Así
fue; así debe de ser</span></i><span lang="ES-AR" style="line-height: 150%;">.<o:p></o:p></span></span></div>
<div>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br clear="all" />
</span><br />
<hr align="left" size="1" width="33%" />
<div id="edn1">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref1" name="_edn1" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[1]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> </span><span lang="ES-AR" style="font-variant: small-caps;">Ferrajoli</span><span lang="ES-AR">,
Luigi, <i>Derecho y razón. Teoría del
garantismo penal, </i>editorial Trotta, p. 93</span></span></div>
</div>
<div id="edn2">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref2" name="_edn2" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-variant: small-caps;"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[2]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Ídem, p. 463/464.</span></span></div>
</div>
<div id="edn3">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref3" name="_edn3" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[3]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Aún más gravosa será si el bien
tutelado afectado es de los que se consideran “<i>primarios</i>”.</span></span></div>
</div>
<div id="edn4">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref4" name="_edn4" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[4]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> <span style="font-variant: small-caps;">Zaffaroni</span>
Eugenio Raúl, <span style="font-variant: small-caps;">Slokar</span> Alejandro, <span style="font-variant: small-caps;">Alagia</span> Alejandro, <i>Derecho Penal: parte general, </i>2da edición, editorial Ediar, p. 812.</span></span></div>
</div>
<div id="edn5">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref5" name="_edn5" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[5]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> CFCP, Sala II, causa nº 14288 caratulada “Ortuño Savedra, Fabiana Fair s/recurso de
casación”, del 18/05/2012.</span></span></div>
</div>
<div id="edn6">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref6" name="_edn6" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[6]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> </span>El voto que lideró el acuerdo estuvo en manos de <st1:personname productid="la Dra. LEDESMA" w:st="on">la Dra. <span style="font-variant: small-caps;">Ledesma</span></st1:personname>,
al que adhirió solamente el Dr. <span style="font-variant: small-caps;">Slokar. </span></span></div>
</div>
<div id="edn7">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref7" name="_edn7" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[7]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Las penas fueron las siguientes: a.
Cuatro (4) años y seis (6) meses de prisión de cumplimiento efectivo; b)
Pérdida de las concesiones, regímenes especiales, privilegios y prerrogativas
de que gozare (art. 876, apartado 1 inc. d) del CA); c.- Inhabilitación
especial de un (1) año y dos (2) meses para el ejercicio del comercio
(art. 876 apartado1 inc. f) del CA); d.-
Inhabilitación especial perpetua para desempeñarse como miembro de las fuerzas
de seguridad (art. 876 apartado 1 inc. f) del CA); e.-
Inhabilitación absoluta por el doble tiempo de la condena para desempeñarse
como funcionario o empleado público (art. 876 apartado 1 inc. h del CA)</span></span></div>
</div>
<div id="edn8">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref8" name="_edn8" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[8]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Pues, el hecho cometido por Juan de
Dios Igarzabal cuya coautoría se atribuyó a su ahijada procesal se trata de un
supuesto de delito imposible (art. 44 del CP). La defensa apuntó que el
Tribunal a la hora de rechazar su planteo, confundió los institutos de tentativa inidónea
y delito imposible, exigiendo a éste último los requisitos de la tentativa
inidónea. De este modo, se
entendió que la interpretación efectuada por el Tribunal violaba el art. 19 de <st1:personname productid="la CN" w:st="on">la CN</st1:personname> porque pretendía considerar
típicas acciones que no ponen en peligro el bien jurídico. Por ello, solicitó
que se hiciera lugar al planteo efectuado, se exima de pena a su defendida o,
en su defecto, se le apliquen las disminuciones previstas en la norma invocada.
Subsidiariamente, planteó que se
califique el accionar de Ortuño Saavedra como partícipe necesaria de los
sucesos objeto del proceso, conforme lo previsto en el art. 46 del C.P.</span></span></div>
</div>
<div id="edn9">
<div class="MsoEndnoteText" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><a href="file:///C:/Users/Mauro/Desktop/Reafirmando%20a%20la%20lesividad%20como%20un%20filtro%20reductor%20punitivo%20ultimo.docx#_ednref9" name="_edn9" title=""><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR"><span class="MsoEndnoteReference"><span lang="ES-AR" style="line-height: 115%;">[9]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Expresión utilizada por Jerome <span style="font-variant: small-caps;">Frank</span> en su obra “<i>Law and the Modern Mind</i>”, citado por Pedro <span style="font-variant: small-caps;">David</span> en “<i>Conducta,
integrativismo y sociología del derecho</i>”, editorial Zavalía, Buenos Aires,
1970, p.97.</span></span></div>
</div>
</div>
<br />
<div>
<div id="edn9">
</div>
</div>Maurohttp://www.blogger.com/profile/18106789163410768021noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-12062654381324070672012-07-06T09:23:00.001-07:002012-07-07T07:11:33.645-07:00LAS COSAS POR SU NOMBRE<div>
<div style="text-align: justify;">
<i>"La Justicia dio por probado que la existencia de una “práctica sistemática y generalizada de sustracción, retención y ocultamiento de menores de edad” en “el marco de un plan general de aniquilación que desplegó sobre parte de la población civil, con el argumento de combatir la subversión implementando métodos del terrorismo de Estado durante los años 1976 a 1983 de la última dictadura militar”. Esa definición, pendiente desde el Juicio a las Juntas de Comandantes que no lo había dado por probado, reclamada durante más de 36 años por las Abuelas de Plaza de Mayo y por los nietos identificados, la dijo ayer la presidenta del Tribunal Oral Federal 6, María del Carmen Roqueta, en la sentencia del juicio por el robo de bebés." </i></div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
(extracto de la nota publicada en el diario Pagina12 titulada “Una práctica sistemática y generalizada” del 6/7/12)</div>
</div>
<div>
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj5yyyhIe7TeRvQ0K3XQwjhO1n42CF6FeBx4VsmMq3GkWSh3IEzwDtZO3__ZAPeKRLoJ8tTtlhUI3k9BU7smT_Qi9rjMWawaJOPhTg0qnMdqFvsTE9p2XSaKNy5rOxbGzGf9qHgB0NL1PZ1/s1600/lucano6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj5yyyhIe7TeRvQ0K3XQwjhO1n42CF6FeBx4VsmMq3GkWSh3IEzwDtZO3__ZAPeKRLoJ8tTtlhUI3k9BU7smT_Qi9rjMWawaJOPhTg0qnMdqFvsTE9p2XSaKNy5rOxbGzGf9qHgB0NL1PZ1/s320/lucano6.jpg" width="261" /></a></div>
<div>
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: x-small;">(<a href="http://www.abuelas.org.ar/muestras/sucesos/suc36.htm">http://www.abuelas.org.ar/muestras/sucesos/suc36.htm</a>)</span></div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div>
<br /></div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<b>Sin conocer el pasado no se puede construir el presente ni planificar el futuro. Por eso, es interesante partir del presente. Que quede claro que aquel mundo y aquel país de los campos de concentración son los mismos que éste, con muchos cambios, avances y retrocesos, pero los mismos...</b></div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<b>Y volver al presente...</b></div>
</div>
<div>
<div style="text-align: justify;">
<b>La relación pasado presente. La comparación constante de los hechos del pasado con los actuales, resignifica el hecho histórico y le da sentido. </b></div>
</div>
<div>
<br /></div>
<div>
<b><i>“Quien controla el pasado controla el futuro, quien controla el presente controla el pasado”</i></b><br />
<b><i></i></b>(“El león y el unicornio”, George Orwel) </div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/16317425336125652175noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-26396633952729498522012-06-26T09:47:00.001-07:002012-08-01T11:03:14.801-07:00CÓMO DEFENDERSE DE LA CÁRCEL<br />
<div align="right" class="MsoNormal" style="text-align: right;">
</div>
<div style="text-align: -webkit-auto;">
<span style="font-size: 16px; line-height: 18px; text-align: justify; text-indent: 30px;"> Sabrina Ascani Torres </span>
</div>
<div style="text-align: -webkit-auto;">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="text-align: -webkit-auto;">
<b style="background-color: white; text-align: justify;"><br /></b></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt;"> El Art. 18 de <st1:personname productid="la Constitucin Nacional" w:st="on">la Constitución Nacional</st1:personname>
prohíbe en forma expresa las penas que asumen el carácter de tormento y la pena
de azotes, asegurando la vigencia del principio de humanidad vinculado con el
de racionalidad republicana. Esta disposición se refuerza con el Art. 75 inc.22
del mismo cuerpo legal, que a partir de distintas prescripciones prohíbe
expresamente la tortura no solo en sentido estricto -con el fin de obtener
información- sino también en sentido amplio -cuando importe una pena-. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-size: 12pt;">Sin embargo, una persona privada de su
libertad<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn1" name="_ftnref1" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[1]</span></span></span></a> en
cualquier institución de encierro se encuentra en un estado de indefensión
total. En un contexto donde se instala un <i>estado
de emergencia securitaria</i><a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn2" name="_ftnref2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[2]</span></span></span></a>, en el
marco de una sociedad de control, al preso no se lo considera persona. Así, en
cualquier centro de detención las pulsiones humanas quedan bajo ese sistema.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-size: 12pt;">Haré referencia a las prácticas de las
fuerzas de seguridad que perpetran la impunidad de las torturas, vejaciones y
apremios ilegales, asegurándolas como prácticas sistemáticas. Ello evidenciando
la particular marginación de la que son víctimas las personas privadas de su
libertad, no solo por la sociedad sino por la agencia judicial misma. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">En los últimos tiempos muchos
colectivos sociales claman por un Estado de seguridad y penitencia en el que se
legitimen diferentes tipos de violencia para resolver y poner fin a la
inseguridad. Se basan en construcciones motivadas en gran parte por los
discursos de los medios masivos de comunicación, una agencia que ejerce criminalización
secundaria</span><a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn3" name="_ftnref3" style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[3]</span></span></span></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;"> con
efectos sin dudas estigmatizantes. En este panorama se entrama una lucha que
habilita la eliminación del delincuente y fundamentalmente en la que se
construye el par </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">delincuente-enemigo</i><a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn4" name="_ftnref4" style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[4]</span></span></span></a><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">,</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;"> con su consiguiente segregación en la
cárcel.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">De esta manera los colectivos
sociales que se constituyen como <i>empresarios
morales<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn5" name="_ftnref5" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><b><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[5]</span></b></span></span></a></i>
instauran un clima social de alarma punitiva en el que no importan las personas
que están en una cárcel. Esto habilita a que el preso sea privado sus derechos
fundamentales, el interrogante siempre fue ¿qué hacer con el otro? <i>“…Como si el tratamiento y la disuasión
fueran las únicas formas de hacer frente a los conflictos…”<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn6" name="_ftnref6" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><b><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[6]</span></b></span></span></a>.
<o:p></o:p></i></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">Desde otro punto de vista se observa en
el personal penitenciario una mentalidad retribucionista, por la función que
cumple y el rol que asume teniendo en vista la seguridad, la guarda y la
contención de los presos. Es importante destacar que se encuentran inmersos en
un sistema que los ha perfeccionado en el rigor y la represión, en pos de
beneficiar a la llamada </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">readaptación
social</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;"> que como plantea Elias Neuman</span><a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn7" name="_ftnref7" style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[7]</span></span></span></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">, todavía
no se sabe en que consiste. Este autor también desarrolla un punto interesante,
que confirma lo que venía diciendo, referido a la selección policizante “el
estereotipo policial está tan cargado de racismo, clasismo y demás perjuicios,
como los del criminal”</span><a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn8" name="_ftnref8" style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[8]</span></span></span></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 35.4pt;">.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Empezando así a definir el ámbito de organización
intracarcelaria, queda en evidencia la manera en como se regulan las relaciones
de poder, la distribución de recursos y privilegios. Este entramado tiende a favorecer
la formación de prácticas inspiradas en el respeto a la violencia institucional
ilegal. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">En este contexto, hay muchas
posibilidades de que la persona que se encuentra privada de su libertad y que
sufre un hecho de violencia nunca llegue a denunciarlo. Esto puede darse por
distintos factores como: miedo a represalias tanto físicas como sanciones arbitrarias,
escasa confianza en la justicia en cuanto a las investigaciones que puedan
realizar para esclarecer los hechos, traslados lejos de su familia, bajas en la
calificación con la consecuencia de no poder asistir a los institutos de
libertad anticipada, amenazas, etc. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">De esta forma quien se encuentra
privado de su libertad naturaliza el hecho de violencia, como ejemplo se puede
decir que las “bienvenidas” a los penales son un hecho que los presos saben que
tienen que soportar.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-indent: 22.5pt;">Ahora bien, en frente a los casos en
donde efectivamente se denuncian torturas y malos tratos, el general de las veces
la respuesta de la agencia judicial es inadecuada.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Los relatos de las personas privadas
de su libertad pierden credibilidad justamente porque la construcción del
delincuente y su segregación implica también un descreimiento a la voz del
preso. El relato oficial, armado por el servicio penitenciario ó la policía se
impone y se concluye en que las lesiones fueron provocadas por caídas en las duchas,
escaleras, en la cancha, por el mismo preso o por el uso de la fuerza mínima e
indispensable para contenerlo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Hay que destacar que la naturalidad
de la agencia judicial frente a estos casos se evidencia a partir de <i>“…distintos factores que incluyen tanto
ciertas estrategias de ocultamiento de los autores materiales (la policía y el
servicio penitenciario) como la incapacidad, pasividad, tolerancia o
connivencia de muchos funcionarios encargados de velar por la seguridad de las
personas detenidas y encarceladas (los funcionarios judiciales).”<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn9" name="_ftnref9" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><b><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[9]</span></b></span></span></a>
</i>De esta forma se compone el marco en el que asegura esta supuesta
invisibilidad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Queda en evidencia que se está por un
lado, a la discrecionalidad de las agencias ejecutivas, con el difícil control
que ello implica; y por otro a la voluntad política que tengan las agencias
judiciales para imponer su observancia. Se puede resumir con lo expresado por
Foucault <i>“La ley y la justicia no vacilan
en proclamar su necesaria asimetría de clases”<span class="MsoFootnoteReference">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn10" name="_ftnref10" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><b><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[10]</span></b></span></a></span>.<o:p></o:p></i></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">El desafío implica reconocer que la
tortura y los malos tratos son prácticas sistemáticas y concebir, a partir del
principio de humanidad como lo hace distinguida doctrina<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftn11" name="_ftnref11" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">[11]</span></span></span></a>, que es
cruel toda pena que resulte brutal en sus consecuencias como la muerte, castración,
esterilización, marcación cutánea, amputación ó intervenciones neurológicas. Incluso
ir mas allá y comprender, como los autores citados, que es igualmente cruel la
pena a perpetuidad porque implica asignarle a la persona una marca jurídica que
la convierte en una persona de inferior dignidad y considerarla como una
persona descartable.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify; text-indent: 22.5pt;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Si bien el contexto descrito resulta
no menos que aterrador, entiendo que debemos comenzar por desenmascarar las
falencias de las instituciones totales y la hipocresía de las agencias
judiciales.</span><o:p></o:p><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
<div>
<br />
<hr align="left" size="1" width="33%" />
<div id="ftn1">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref1" name="_ftn1" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[1]</span></span></span></a> Situación
denominada por Foucault como un “secuestro legal”<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn2">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref2" name="_ftn2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[2]</span></span></span></a> En
Muertes Silenciadas: la eliminación de los “delincuentes”. Una mirada sobre las
prácticas y los discursos de los medios de comunicación, la policía y la justicia,
Bs. As, Ediciones del CCC, 2009.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn3">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref3" name="_ftn3" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[3]</span></span></span></a>
“Por lo general la criminalización primaria la ejercen agencias políticas
(parlamentos y ejecutivos), en tanto que el programa que implican lo deben
llevar a cabo las agencias de criminalización secundaria (policía, jueces,
agentes penitenciarios) (..) la criminalización secundaria es la acción
punitiva ejercida sobre personas concretas” En Derecho Penal, Parte General,
Zaffaroni Alagia y Slokar, Bs. As., EDIAR, 2002<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn4">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref4" name="_ftn4" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[4]</span></span></span></a>
op.cit.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn5">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref5" name="_ftn5" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[5]</span></span></span></a> Becker,
H en “Los extraños. Sociología de la desviación” Bs. As., Editorial Tiempo Contemporáneo,1971.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn6">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref6" name="_ftn6" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[6]</span></span></span></a>
En Los límites del dolor, Nils Christie, Oslo 1981, traducción en español por
Fondo de Cultura Económica, México 1984.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn7">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref7" name="_ftn7" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[7]</span></span></span></a>
En Sida en Prisión: un genocidio actual, Elias Neuman, Ed. De Palma.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn8">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref8" name="_ftn8" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[8]</span></span></span></a>
En Derecho Penal, Parte General, Zaffaroni Alagia y Slokar, Bs. As., EDIAR,
2002.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn9">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref9" name="_ftn9" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[9]</span></span></span></a>
Fragmento extraído de: CELS, Temas para pensar la crisis, Colapso del Sistema
carcelario: la tortura y las respuestas judiciales en la provincia de Buenos
Aires, por Paula Litvachky y María Josefina Martinez, Siglo XXI editores.<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn10">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref10" name="_ftn10" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[10]</span></span></span></a>
En Vigilar y Castigar: nacimiento de la prisión, Michel Foucault, Siglo XXI
Editores, Bs.As., 2008<o:p></o:p></div>
</div>
<div id="ftn11">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///C:/Users/memo/Downloads/COMO%20DEFENDERSE%20DE%20LA%20C%C3%81RCEL%20(2).doc#_ftnref11" name="_ftn11" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span style="font-family: Calibri, sans-serif; font-size: 10pt; line-height: 115%;">[11]</span></span></span></a>
En Derecho Penal, Parte General, Zaffaroni Alagia y Slokar, Bs. As., EDIAR,
2002.<o:p></o:p></div>
</div>
</div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/16317425336125652175noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-18924657662862831362012-06-23T11:19:00.000-07:002012-06-24T18:24:55.807-07:00COMUNICADO DE PRENSA DE LA CIDH<br />
<h4>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Con motivo de los recientes acontecimientos en Paraguay, siendo un evento que no consideramos menor, compartimos aquí un comunicado emitido por la CIDH.</span></h4>
<div>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<h2>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: large;">CIDH expresa preocupación por destitución del Presidente de Paraguay</span></h2>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">23 de junio de 2012</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Washington, D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresa su profunda preocupación ante la destitución del presidente de Paraguay, Fernando Lugo, a través de un juicio político que por su rapidez, plantea profundos cuestionamientos sobre la integridad del mismo.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La Cámara de Diputados de Paraguay resolvió el 21 de junio de 2012 iniciar un juicio político contra el presidente Lugo, y al día siguiente la Cámara de Senadores votó la destitución con 39 votos a favor, cuatro en contra y dos ausencias. La resolución sobre el procedimiento a seguir, aprobada por el Senado de Paraguay el 21 de junio, estableció que el Presidente Lugo debía presentar su defensa al día siguiente y por espacio de dos horas. Según informaciones de prensa, fue rechazada una solicitud de más tiempo para preparar la defensa presentada ante el Senado por los representantes del presidente Lugo.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La Comisión Interamericana considera inaceptable lo expedito del juicio político contra el presidente constitucional y democráticamente electo. Considerando que se trata de un proceso para la remoción de un Jefe de Estado, es altamente cuestionable que éste pueda hacerse respetando el debido proceso para la realización de un juicio imparcial en tan sólo 24 horas. La Comisión considera que el procedimiento seguido afecta la vigencia del Estado de Derecho en Paraguay.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div style="text-align: justify;">
<a href="http://www.oas.org/es/cidh/prensa/Comunicados/2012/072.asp">http://www.oas.org/es/cidh/prensa/Comunicados/2012/072.asp</a>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/16317425336125652175noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-538472988540114093.post-41641729568861441522012-05-30T19:18:00.002-07:002012-06-14T19:15:44.260-07:00NUEVA VICTORIA DEL DISCURSO PUNITIVISTA EN CUESTIONES DE GÉNERO<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 115%;">“</span><i style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 115%;">El Estado es masculino en el sentido
feminista. El derecho ve y trata a las mujeres de la manera como los hombres
las ven y las tratan. El Estado liberal coercitiva y autoritariamente
constituye el orden social según los intereses de los hombres como género, a
través de la legitimización de sus normas, la relación con la sociedad y
políticas sustantivas...</i><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 115%;">” (Catharine </span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; font-variant: small-caps; line-height: 115%;">MacKinnon</span><span class="MsoFootnoteReference" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="vertical-align: baseline;">
</span></span><span style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 115%;">)</span><a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftn1" name="_ftnref1" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 115%;" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">[1]</span></span></span></a></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Si aceptamos esta reflexión propuesta por MacKinnon, sería conveniente
desaconsejar a las mujeres esperar alguna respuesta favorable por parte de este
instrumento patriarcal llamado Estado. Sin embargo, son cada vez más frecuentes
las apelaciones al derecho -más precisamente al sistema penal- por parte de los
movimientos feministas, en busca de soluciones a sus problemas y como forma de
reclamo de derechos. Pareciera que el derecho tiene soluciones para todo, de
una manera casi inmediata y con consecuencias efectivas: cualquier reclamo
social aspira a convertirse en una normativa concreta que especifique y regule cómo
se materializa el ejercicio de determinado derecho.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Ahora bien, deberíamos preguntarnos porqué se elige a la justicia penal
como solución más atractiva frente a determinados conflictos sociales. ¿Acaso
criminalizar la conducta que no nos gusta es la respuesta más fácil? ¿Es verdad
que para todo problema social hay una solución legal? Incluso, podríamos hacer
un análisis más osado e interrogarnos porqué cuando el derecho fracasa en la
solución a los problemas, se termina recurriendo a mayor demanda de derecho
para encubrir las deficiencias de la legislación vigente. Así, cuando
determinado comportamiento ya se encuentra tipificado en el código Penal, se
elevan las penas como si ello fuera a solucionar el problema. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Algunas respuestas posibles a estos interrogantes podrían ser las
siguientes:<o:p></o:p></span></div>
<div class="ListParagraphCxSpFirst" style="line-height: 150%; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Symbol; font-size: 12pt; line-height: 150%;">·<span style="font-family: 'Times New Roman'; font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">La justificación de la apelación al derecho
penal tanto por las mujeres, como por otros grupos sociales, está dada por la
necesidad de recurrir con sus reclamos al Estado, por ser éste el encargado de
decidir y componer los conflictos sociales.<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftn2" name="_ftnref2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">[2]</span></span></span></a><o:p></o:p></span></div>
<div class="ListParagraphCxSpMiddle" style="line-height: 150%; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Symbol; font-size: 12pt; line-height: 150%;">·<span style="font-family: 'Times New Roman'; font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">La importancia de la función simbólica del
derecho: ciertos temas –como lo es en este caso la violencia de género− pasan a
ser públicos y a ocupar un lugar en el discurso político y mediático, una vez
que son enmarcados dentro de un contexto juspenalístico. <o:p></o:p></span></div>
<div class="ListParagraphCxSpMiddle" style="line-height: 150%; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Symbol; font-size: 12pt; line-height: 150%;">·<span style="font-family: 'Times New Roman'; font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">La respuesta que se espera del derecho
penal, está íntimamente relacionada con las funciones <i>propias</i> de esta rama del derecho: la prevención general y especial
– mediante la amenaza del castigo, y/o la eliminación (encarcelamiento) del
responsable– el orden de valores que se pretende proteger en una determinada
colectividad y la función del derecho como instrumento pedagógico en la
formación de modelos culturales dominantes.<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftn3" name="_ftnref3" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">[3]</span></span></span></a><o:p></o:p></span></div>
<div class="ListParagraphCxSpMiddle" style="line-height: 150%; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Symbol; font-size: 12pt; line-height: 150%;">·<span style="font-family: 'Times New Roman'; font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">La atribución de responsabilidad en el
ámbito penal es <i>individual</i>, por lo
tanto, la utilización del derecho penal se mostraría eficaz en la imputación de
la conducta lesiva a individuos claramente identificables.<o:p></o:p></span></div>
<div class="ListParagraphCxSpLast" style="line-height: 150%; mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Symbol; font-size: 12pt; line-height: 150%;">·<span style="font-family: 'Times New Roman'; font-size: 7pt; line-height: normal;">
</span></span><span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">La apelación al derecho penal por parte de
grupos de mujeres, legitima la identidad colectiva del grupo actor, al ser
aceptados –y tomados en serio− dentro del discurso político.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Sin embargo, la realidad muestra que la apelación al derecho penal por
parte de varios grupos feministas, no ha tenido las consecuencias favorables
que éstos esperaban en un primer momento. De hecho, son muchas las
consecuencias negativas que se producen, una vez que el Estado interviene y le
expropia los conflictos a los grupos reclamantes. Sin hacer una enumeración
exhaustiva se pueden nombrar las siguientes: la <i>simplificación del problema</i>, el <i>cambio
de rol</i> de estos grupos al pasar de <i>promotor</i>
a la <i>categoría de víctima</i>, el pase de
un discurso de <i>grupo autodeterminado</i>
a la adquisición de un estatus de <i>individuos
“susceptibles de ser vulnerados”</i> y, por ende necesitados de protección
estatal, entre otras.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Dentro del contexto de las demandas de criminalización encabezadas por
algunos grupos feministas, se enmarca la discusión actual acerca de la
inclusión en el Código Penal Nacional de la figura de femicidio como agravante
del homicidio simple (art. 79 del Código Penal). Inclusión ésta que no
configura una excepción que escape a las consecuencias mencionadas en el párrafo
anterior.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">El término femicidio<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftn4" name="_ftnref4" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">[4]</span></span></span></a>
es un término político y constituye una de las formas más extremas de violencia
hacia las mujeres. Es el asesinato cometido por un hombre hacia una mujer, por
considerarla de su propiedad. Es decir, que no cualquier asesinato de una mujer
constituye un femicidio, sino <i>únicamente</i>
aquel que se lleva a cabo dentro de un contexto de violencia de género. El
glosario español de Género de IPS en su última versión<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftn5" name="_ftnref5" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">[5]</span></span></span></a>,
define al feminicidio como el “<i>asesinato
de la mujer en razón de su género, por odio hacia las mujeres, por rechazo a su
autonomía y su valor como persona o por razones de demostración de poder
machista o sexista. El feminicidio incluye una connotación de genocidio contra
las mujeres. Por esta razón se prefiere feminicidio a femicidio, un término que
hace referencia a todos los homicidios que tienen como víctima a una mujer, sin
implicar una causa de género. Sin embargo, algunos países han incorporado el
término femicidio a su ordenamiento jurídico con varias de las connotaciones
anotadas arriba para feminicidio.</i>”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">En la actualidad, el principal obstáculo que se advierte al momento de
abordar desde la justicia penal aquellas conductas que configuran femicidio, es
el desconocimiento de los jueces del componente sexista, inherente y
constitutivo de la conducta incurrida. Los magistrados suelen analizar los
casos de femicidio como si fuesen un homicidio más. O lo que es peor, los
minimizan sosteniendo que se trata de un “crimen pasional”, colocando a la
mujer en el papel de “sospechosa” de haber provocado el ataque que hizo al
sujeto “perder la cordura”. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Esta situación, ha sido advertida y denunciada por la totalidad de
aquellos movimientos que luchan por la igualdad entre hombres y mujeres y
buscan erradicar las distintas prácticas que configuran violencia de género.
Sin embargo, no todos los colectivos feministas han canalizado éste reclamo de
la misma manera.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">La discusión semanas atrás en el Congreso Nacional de varios proyectos (ver más al respecto <a href="http://www.cepoc-cepoc.blogspot.com.ar/2012/03/femicidio-algunas-reflexiones-sobre-los.html">aquí</a> y <a href="http://locostumberosyfaloperos.blogspot.com.ar/2012/05/feminismo-punitivo.html">aquí</a>) que tipifican la conducta de femicidio como un agravante del homicidio simple,
parecería dar cuenta que, desde el Estado, se ha primado el discurso
punitivista por sobre otros discursos (feministas) que también buscan combatir
esta práctica sexista.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">La violencia de género es un fenómeno complejo, un problema social
transversal a las distintas clases sociales que debe ser abordado con leyes
integrales y no únicamente con un simple aumento de penas, que es lo que el
populismo punitivo exige y que en definitiva, sabido es que no consigue reducir
de forma significativa la comisión de los delitos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Desde este espacio, sostenemos que el aumento en las penas para aquellos
casos que constituyan femicidio, no traerá aparejada una disminución de estas
muertes, ni generará un cambio en la conciencia social. La deficiencia no está
en la falta de leyes, sino en la forma en que éstas son aplicadas. Tanto la
legislación nacional (arts. 79 y 80 del Código Penal) como la internacional
(Tratados de Derechos Humanos con jerarquía constitucional como es la
Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la
Mujer), brindan un profuso catálogo de normas que permiten castigar los
femicidios y que descartan el discurso de un vacío legal sobre el tema. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">El problema actual está en la mala o nula aplicación de estas normas y
en la falta de políticas adecuadas que fomenten un verdadero abordaje hacia el
análisis de las cuestiones de género. La intervención del Estado debería
apuntar a ser anterior y no únicamente posterior al hecho en sí. En este
sentido, deberían surgir desde el propio Estado soluciones alternativas al
aumento de las penas, como sería el hecho de garantizar una protección adecuada
a aquellas mujeres que hayan sido víctimas de violencia. Es decir, garantizar
un <i>verdadero acceso a la justicia</i>
cuando se dan este tipo de casos. Esto es fundamental, ya que se sabe que no
son pocas las mujeres que descreen del sistema penal como un recurso que pueda
ayudarlas en su situación. ¿Cuántas veces ha pasado que los medios de
comunicación muestran un caso de femicidio donde las víctimas intentaron
denunciar los primeros maltratos y el personal policial no quiso recibirles la
denuncia? Incluso, hay casos donde las mujeres tienen miedo de hacer las
denuncias dentro del ámbito judicial y no saben dónde más acudir.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Otras soluciones alternativas, podrían ser: <i>mejorar los mecanismos de protección existentes</i>, tanto previos como
posteriores a la condena; realizar programas dirigidos a colectivos específicos
de mujeres; establecer desde los niveles iniciales de enseñanza escolar
programas educativos que incluyan la temática de género; realizar
capacitaciones en el ámbito judicial a los fines de que los operadores
jurídicos puedan visualizar y reconocer cuándo están en presencia de un
femicidio; entre otras. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span><br />
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;">Hacer prevalecer el discurso punitivista por sobre otros discursos, no
hace más que reforzar la idea de que el derecho penal es la solución a todos los males de nuestra sociedad y que
ésta parecería estar más interesada en el castigo que en la protección de sus
habitantes. Si bien es cierto que la creación de nuevas figuras penales o el
incremento de las sanciones conllevan una función simbólica, no podemos perder
de vista que -desde un Estado de Derecho que respeta la Constitución- ésta no
puede ser la única función perseguible por el derecho penal. También se espera
que éste sea eficaz y que defienda el principio de mínima intervención en
materia punitiva: el derecho penal es la “última ratio” y no la primera.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 150%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 35.4pt;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: -webkit-auto; text-indent: 0px;">
<span lang="ES-AR" style="font-family: Arial; font-size: 12pt; line-height: 17px;"><br class="Apple-interchange-newline" /> Julia <span style="font-variant: small-caps;">Baliña<o:p></o:p></span></span></div>
<br />
<br />
<div>
<br />
<hr align="left" size="1" width="33%" />
<div id="ftn1">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftnref1" name="_ftn1" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-family: Calibri;"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; line-height: 115%;">[1]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> <span style="font-variant: small-caps;">MacKinnon</span>, Catharine
A. “Feminismo, marxismo, método y Estado: hacia una teoría del derecho
feminista”, en crítica Jurídica. Teoría y sociología jurídica en los Estados Unidos, Ediciones Uniandes,
Bogotá, 2006, pág. 203.</span></div>
</div>
<div id="ftn2">
<div class="MsoFootnoteText" style="line-height: 12.0pt; mso-line-height-rule: exactly; text-align: justify;">
<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftnref2" name="_ftn2" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-family: Calibri;"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; line-height: 115%;">[2]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Cf. <span style="font-variant: small-caps;">Bovino</span>, Alberto;
“Delitos sexuales y feminismo legal (algunas) mujeres al borde de un ataque de
nervios”; Revista electrónica de la Asociación de Ciencias Penales; Diciembre
1997, año 9 número 14.<a href="http://www.blogger.com/blogger.g?blogID=538472988540114093" name="_GoBack"></a></span></div>
</div>
<div id="ftn3">
<div class="MsoFootnoteText">
<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftnref3" name="_ftn3" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-family: Calibri;"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; line-height: 115%;">[3]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Cf. <span style="font-variant: small-caps;">Pitch</span>, Tamar;
“Responsabilidades Limitadas. Actores, conflictos y justicia penal”; Buenos
Aires; Editorial Ad Hoc; 2003; págs. 135-136.</span></div>
<div class="MsoFootnoteText">
<br /></div>
</div>
<div id="ftn4">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftnref4" name="_ftn4" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-family: Calibri;"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; line-height: 115%;">[4]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> El término “femicidio” o “feminicidio” proviene del inglés
“femicide”, concebido por las feministas estadounidenses para referirse a
aquellas muertes de mujeres efectuadas dentro de un contexto de violencia de
género. Etimológicamente, correspondería usar el término “feminicidio” toda vez
que deriva de la palabra “femina” (hembra) cuya raíz o base es <i>femin-</i> y no <i>femi. </i>Habitualmente –y como sucede en el caso argentino– el término
es empleado incorrectamente, ya que se invoca el vocablo “femicidio” (que
abarcaría el asesinato de una mujer por cualquier causa) en lugar de
“feminicidio” (que hace referencia a la existencia de motivos sexistas como
desencadenantes de la muerte). Sin embargo, varios países –entre los que próximamente
se incluirá el nuestro- han incorporado el término “femicidio” en su
legislación penal, con las connotaciones propias del vocablo “feminicidio”. En
este sentido, debemos aclarar que si bien en el presente artículo haremos
mención al término “femicidio”, destacamos que correspondería utilizarse el
vocablo “feminicidio” para hacer referencia a este tipo de muertes.</span></div>
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div id="ftn5">
<div class="MsoFootnoteText" style="text-align: justify;">
<a href="file:///E:/Documentos/publicaciones%20Blog/Julia%20Art%C3%ADculo2.docx#_ftnref5" name="_ftn5" title=""><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-family: Calibri;"><span class="MsoFootnoteReference"><span lang="ES-AR" style="font-size: 10pt; line-height: 115%;">[5]</span></span></span></span></a><span lang="ES-AR"> Glosario de Género y Desarrollo de IPS, editado por Johanna Son, 3°
edición, junio 2010.</span></div>
</div>
</div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/16317425336125652175noreply@blogger.com2